En la larga historia del Racing hemos sido testigos de algún que otro partido desastroso, para olvidar, donde todo sale mal, esos encuentros que, cuando acaban, piensas: “hemos hecho la paparda“. En esta ocasión vamos a recordar una de las mayores “tracas verdiblancas“. El día que nos ganó el Sporting (bueno, eso no se puede calificar como paparda, ¿no?…si el rival lleva 238 días sin ganar, sí)…

Nos situamos en la temporada 1997-98. El devenir de la liga nos lleva hasta la jornada 24ª, en la que destaca sobremanera el colista de la competición. Se trata del Sporting  de Gijón, que en 23 jornadas cuenta en su casillero con 3 (si,tres) puntos. 20 derrotas y 3 empates es el balance gijonés hasta el momento. Veintidós puntos le separan de la salvación. Por su parte, el Racing es 14º en la tabla con 27 puntos en su casillero, tres por encima de la zona de promoción (que ocupaba el Salamanca).

En la ida el equipo verdiblanco había vencido 4-1, con triplete del gran Petete Correa, gol de Beschastnykh, conmoción cerebral de Ceballos y expulsión de Schurrer. Era el debút de Antonio Maceda en el banquillo sportinguista (donde permaneció durante 11 partidos).

Pero estamos en la jornada 24ª, donde asturianos y cántabros (separados por !24! puntos) de enfrentan en El Molinón, partido que, en vista de la temporada de los locales, pintaba bien para el equipo verdiblanco.

El encuentro comienza con el Sporting avisando, y a los 22 minutos Rodrigao marca el 1-0. Tan sólo dos minutos depués Tomás, de penalti cometido por Diego López sobre Tcheryshev, hace el 2-0. El Racing no reacciona, pese a que la entrada en el campo de Porfirio (sustiyendo al lesionado Sietes) en el 33 le da más mordiente.

Llegamos al descanso con ventaja del Sporting (algo inédito a lo largo de la temporada). El Racing sale apretando en la segunda parte, y Alberto (que había reemplazado a Correa), reduce distancias en el 47. Los nervios atenazan a los locales,comenzando a perder el control en el medio del campo.

La mejor ocasión para empatar la tiene el Racing en un balón que salva Manolo bajos los palos, cuando el portero Lekovic ya estaba batido.  Por su parte el Sporting asusta con un par de tiros de Velasco y José Manuel.

El partido finaliza y comienza la fiesta entre la parroquia local, que festeja la victoria como si de un título se tratase. No es para menos, ya que acaban de romper una sequía de 238 días sin ganar. La primera victoria en 24 jornadas de liga.

Paparda verdiblanca.

Como es lógico, el Sporting acabaría descendiendo a Segunda, logrando un total de 13 puntos. Tan sólo otro equipo fue superado por los de Gijón, el Espanyol, al que venció (1-0) en el Molinón un mes después de superar al equipo cántabro.

El Racing, que en la jornada siguiente venció (3-1) al Tenerife, acabaría la liga en 14ª posición, un punto por encima de la zona de descenso. Salvación lograda con el gran Nando Yosu en el banquillo, el cual había reemplazado a Marcos Alonso a falta de 10 jornadas para que finalizase el campeonato.